Porzana carolina
Ayer estuve en el Jardín Botánico José Celestino Mutis, de Bogotá, uno de mis lugares favoritos para pajarear. El motivo principal, fotografiar especímenes migratorios y allí me encontré con los habituales: cardenales (Piranga sp.), zorzales (Catharus sp.) y atrapamoscas (Contopus sp. y Empidonax sp.). También un atrapamoscas copetón (Myiarchus crinitus), un juvenil de gavilán aliancho (Buteo platypterus) y la sorpresa del día: ¡un juvenil de polluela norteña (Porzana carolina)! En el sector del Jardín Botánico que recrea los humedales, habitado normalmente por un grupo de gansos y una tortuga, en un rincón donde han hecho un semillero de higuerilla (Ricinus commnunis) me encontraba fotografiando una hembra de Piranga rubra, cuando a escasos dos metros de mí apareció esta maravilla migratoria caminando tranquilamente entre los brotes recién emergidos de higuerilla. La polluela norteña estaba tan confiada que en lugar de alejarse de mi, se acercó hasta una distancia de un metro.